viernes, 23 de febrero de 2007

UNA VISITA INESPERADA

Aquella fría noche se despertó llorando sus ojos estaban hinchados y le costaba trabajo respirar sus manos estaban frías y tiritaba no supo de qué... si de frío o de miedo, su mente estaba en negro y no supo que pensar no pudo recordar aquella pesadilla de la cual venía despertando, o por lo menos, eso creía...

Se levantó de su cama y caminó hacia la ventana casi por inercia, pensó en abrir la cortina pero con tan solo imaginarlo sus manos tiritaban, hasta que por fin aproximó una de ellas hacia la ventana cerró fuertemente sus ojos al momento de hacerlo, luego, los abrió lentamente y sólo vio oscuridad. De pronto, se percató de una luz roja, pequeña, pero que se aproximaba cada vez más, sintió una inquietud en su interior y cerró violentamente la cortina. Intentó tranquilizarse, y cuando por fin lo logró volvió a abrir la cortina... grande fue su sorpresa al descubrir que aquella luz, pequeña en su momento, era ahora un enorme ser ubicado fuera de su ventana. Los ojos de aquel ser eran negros y brillaban con mayor intensidad acorde iba creciendo su miedo, corrió rápidamente hacia su cama y se tapó hasta la cabeza, puso sus manos en sus oídos y cerró temerosamente sus ojos, aún así escuchaba el respirar de ese misterioso ser, y cada vez lo escuchaba más y más cerca... él solo pensaba: "no quiero morir, no quiero morir" pero él no sabía que su destino ya estaba escrito.

Gritó, pero fue como gritar en el vacío, intentó llorar, pero ya no le quedaban lágrimas quizo escapar, pero ya no había salida...

De pronto, sintió que lo destapaban lentamente... su temor aumentó y la desesperación se apoderó de su cuerpo, no quiso abrir los ojos, mas por un segundo pensó en hacerlo, pero fue más fuerte el pensamiento que creó en aquel segundo, no supo cómo pero abrió sus ojos, al abrirlos no vió nada ni a nadie. Se puso de pie al lado de su cama, y pensó: "fue otra pesadilla más" su alma volvió a la calma, y se mantuvo así por unos momentos, luego recordó: "en lo pacífico se encuentra el verdadero peligro" y sin pensarlo volteó, no alcanzó ni siquiera a formular un solo pensamiento cuando por fin... el óbito lo había abrazado...