jueves, 15 de marzo de 2007

Solo un pensamiento...

En las siguientes líneas se encuentran un montón de palabras ordenadas para que al leerlas se vean agradables, en aquellas palabras trato de expresar lo que siento por la vida, lo que pasa cuando en una amistad ya no hay confianza, lo miserable que se siente cuando un amigo te da la espalda, lo angustioso que es el darte cuenta de que la única compañera que tienes es la soledad. Aquí intento expresar con simples palabras lo que pasa por mi mente, todos esos sentimientos opacados por aquellas emociones que nublaron mi visión y oscurecieron mi forma de ver la vida, todos aquellos acontecimientos que he vivido o que he conocido me han ayudado a ampliar mi mente y saber mirar con los ojos del alma, a poder salir por un momento de mi cuerpo terrenal y volar, ser libre. En mi corta existencia no tengo claro lo que quiero, pero sí tengo claro lo que no quiero: no quiero más mentiras, no quiero más guerras, no quiero que sigan matando la naturaleza, no quiero que sigan torturando a los animales, no quiero que la humanidad se siga matando a sí misma, no quiero ver al Planeta Tierra destruido por la ambición, sé que esto es muy difícil que se cumpla, todos están cegados por su avaricia y no saben ver más allá de lo que ven sus ojos, ellos le temen a perder todo lo que han conseguido, no saben amar verdaderamente, no saben ver las cosas realmente importantes de la vida, a veces, las cosas más insignificantes pueden ser las más significativas, pero ellos creen en su cordura que no es más que la locura, ellos no entienden ni entenderán nunca el significado de la vida, ni de la muerte. Para muchas personas la muerte es lo peor que les puede pasar, mas yo no pienso así, la muerte es la liberación del alma, verdaderamente la muerte es el principio de la verdadera vida. El infierno no existe, el infierno está aquí, vivimos cada día en él, respirando el aire contaminado por esta asquerosa humanidad. Hay personas que se preguntan por qué soy así, por qué mi vestimenta está “fuera de lo normal” según ellos, se preguntan por qué ando siempre seria y con una mirada fría, la respuesta es simple: mi vestimenta es solo una forma de mostrarle al mundo el mal que nos estamos haciendo y que eso me tiene profundamente triste, mi seriedad es porque no hay ningún motivo por el que realmente valga la pena andar con una sonrisa si no la siento, y para demostrar que el estar triste, seria o enojada es una emoción tan aceptable como lo es estar alegre, mi fría y a veces intimidante mirada es para que respeten mi forma de ser y de pensar, de lo contrario, nadie, absolutamente nadie lo haría, si no te haces respetar nadie te respetará. Hay que darse cuenta de que vivimos en un mundo vacío y sin sentimientos, vivimos en la oscuridad, con el miedo de que en cualquier momento pase cualquier cosa. Tengo la certeza que la naturaleza no tardará en demostrar su ira y su furia para con nosotros, en cualquier instante vendrá y borrará todo lo que han hecho, ese día llegará, el mar se enfurecerá, los vientos se liberarán y la tierra vibrará de ira. Y espero ansiosamente de que ello suceda...

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